La pandemia provocó que más personas trabajaran desde casa. El trabajo remoto se ha convertido en una opción cada vez más popular para algunas personas. El teletrabajo también se ha visto afectado por la pandemia, pero todavía lo utilizan algunas personas que necesitan concentrarse en su trabajo y también quieren compensar el impacto ambiental de los desplazamientos.
La idea del trabajo a distancia no es nueva. En realidad, fue introducido por primera vez en 1962 por Robert Cornish, un ingeniero informático que trabajaba para IBM en ese momento. Pero no fue hasta el advenimiento de las computadoras personales y los avances posteriores en las tecnologías de redes que el trabajo remoto se volvió más factible y más popular entre las empresas que querían reducir los costos de espacio de oficina.
Algunas empresas que se vieron duramente afectadas por la pandemia comenzaron a alentar a sus empleados a trabajar a distancia en lugar de ir a la oficina porque no podían arriesgarse.
Y fruto de esta nueva tendencia, mucha gente que vive en ciudades ha aprovechado para “escaparse” a zonas menos pobladas para coger aire, ya que su trabajo, en su nueva modalidad de teletrabajo, no les ata a tener que residir en la ciudad.
Evidentemente muchas personas han decidido apostar por destinos de islas para situar su base operativa laboral. Pero la alta demanda y los precios han provocado que esta opción no sea la más económica. Otras personas han apostado por paraísos naturales, menos demandados y más “fresquitos”, como es el caso de Asturias.
De entre todos los profesionales que trabajan deslocalizados quiero centrar mi atención en este post en los “knowmadas digitales”, profesionales freelance, que ofertan sus servicios online y por lo tanto son los que gozan de una mayor libertad. Servicios como el Diseño Web, el Copywriting, la Gestión de Redes Sociales, el SEO-Posicionamiento Web…etc.
Pero no todo va a ser positivo, ya que el hecho de ser un profesional en movilidad no es garantía de ninguna profesionalidad. Con la llegada de los knowmadas digitales la oferta se dispara a nivel local, los precios bajan (ya que un profesional independiente tiene menos gastos que una agencia), y por desgracia, también suele bajar la calidad.
Si buscamos Diseño Web Asturias estando geolocalizados en la zona veremos la oferta de las agencias y profesionales locales, pero también las de todos los recién llegados, con sus aspectos positivos y negativos.
Recuerda que como en todas las cosas propias del mercado, lo barato sale caro, y es mejor contar con los servicios de profesionales con trayectoria y con proyectos reconocibles en su portfolio, a pesar de que el precio final pueda ser algo superior.
Al fin y al cabo vivimos en una economía en la que los canales digitales cada vez son más importantes para los negocios. Una página web es un gran escaparate al mundo para los negocios, su comunicación uno de los principales recursos para vender, sus redes sociales una vía de comunicación directa con sus clientes y comunidad…etc. Cuidemos estos recursos y activos para no tener que lamentar por haber intentado ahorrar unos pocos euros.
